Lo imperdible de Grecia
Grecia es sinónimo de playas increíbles e historia milenaria. La República Helénica, su nombre oficial, se encuentra situada entre el mar Mediterráneo (al sur), el mar Egeo (al este) y el mar Jónico (al oeste). Está conformada por 7 archipiélagos con 1400 islas, de las que solo 227 están habitadas. Aunque cuando pensamos en Grecia pensamos en sus costas, el 80% del territorio tiene un relieve montañoso, donde se emplazan las típicas casas sobre la montaña de sus famosas postales. Pero claro que se destacan sus 13.676 km de costas de mar transparente.
Además, no se puede pasar por alto su enorme historia sobre la civilización de la Antigua Grecia, precursora de la civilización de hoy en día. Allí nació la democracia, la filosofía, la política, los Juegos Olímpicos, los más importantes principios de la ciencia y la matemática y también de su conocida literatura. Y, aunque hoy los griegos se identifiquen mayormente con una fe cristiana ortodoxa, fueron (y son) conocidos mundialmente por su mitología y sus dioses y semidioses tan populares como Zeus, Afrodita, Hércules, Atenea, entre otros, que siguen siendo objeto de estudio hasta el día de hoy.
Definitivamente, viajar a Grecia es conocer un lugar mágico, lleno de lugares e historia por conocer. Lo mejor, es que se encuentra a pocas horas en avión de España. ¿Quieres saber cuáles son los principales atractivos más inolvidables que tiene este país? ¡Acompáñanos a recorrerlos!
Atenas: la Acrópolis y el Teatro de Dionisio
Es casi obligatorio empezar por Atenas, la capital de Grecia y la ciudad más poblada del país, además de la más grande y una de las más viejas del mundo. Allí se concentraba la civilización antigua, hogar de grandes artistas, escritores y filósofos. Es uno de los lugares más increíbles en materia de arqueología, especialmente por la Acrópolis.
La Acrópolis está ubicada en un lugar estratégico: en la cima de una colina, el punto más alto, donde se puede ver a toda la ciudad. Ésta contiene al Partenón, su principal edificio y un símbolo de Grecia, que fue construido entre los años 447 y 432 a.C. para resguardar una enorme escultura de Atenea Parthenos, la diosa guardiana de la ciudad. En la entrada, se encuentra el Propileos, un edificio rectangular con las típicas columnas que delimitaba 5 puertas de acceso a la Acrópolis y, además, contenía en su ala sur el templo de Atenea Niké, símbolo de la victoria de los griegos sobre los persas, a la que le cortaron las alas para que nunca abandone la ciudad. En la parte más sagrada (donde según la mitología, Atenea hizo florecer el primer olivo de Grecia), se construyó entre los años 420 y 406 a.C., Erection: un templo jónico con las famosas Cariátides (columnas con forma de mujer).
No importa si eres antropólogo, aficionado de la historia o un simple turista: la Acrópolis fascina a todos por igual.
En la ladera sur de la Acrópolis, se encuentra otro lugar histórico importantísimo en Atenas: el Teatro de Dionisio, construido en el siglo VI a.C. por los griegos, con capacidad para 17.000 espectadores. Estaba dedicado al dios del vino y del teatro (Dionisio) y allí se rendía culto a los dioses, así como también se representaba a Atenas y a tragedias clásicas de Esquilo, Sófocles, Eurípides, Aristófanes, entre otros famosos autores. ¿Te imaginas sentarte en la primera fila de las gradas, sintiéndote como un importante ciudadano de la Antigua Grecia? Para ello en Greca Viajes podrás encontrar muy buenas promociones.
Santorini
Es un archipiélago pequeño y circular formado por islas volcánicas en medio del mar Egeo. En realidad, su forma particular se debe a una erupción volcánica que hundió gran parte de su territorio ¡Tranquilos! Esto pasó hace 10.000 años, ya no hay peligro. Según los autores griegos antiguos, su nombre original era Kallisté que significaba “la más hermosa”. Ya te imaginarás con lo que te vas a encontrar en la isla ¿verdad?
Santorini es la típica isla griega que vemos en las fotos: con un territorio irregular con casas blancas (pintadas de este color por el calor) y playas de arena negra, como Perissa, perfecta para deportes acuáticos, Monolothos, rodeada de árboles, Cabo Colombo, Vlychada, Perivolos o la famosa Red Beach, de arena rojiza con imponentes acantilados. También merece ser visitado Akrotiri, un sitio arqueológico con ruinas abiertas al público de la antigua ciudad enterrada bajo las cenizas del volcán luego de su erupción en 1967. No puede perderse recorrer en barco las costas de Santorini y las islas cercanas.
Fira, su capital, es muy popular, ya que encierra la vida más movida, con tiendas de marca, bares, cervecerías, restaurantes y su increíble vista. Oia, uno de los pueblos más encantadores, es mucho más exclusivo, con hoteles de diseño, villas y complejos exclusivos, aunque hace solo 70 años fue devastado por un terremoto. Los griegos parecen ser expertos en reconstruirse y volver con más fuerza ¿verdad?
Mykonos
Esta pequeña isla ubicada en el mar Egeo, llamada localmente “Jora”, es una de las más turísticas de Grecia. Allí se vive un gran ambiente fiestero, con kilómetros de playas paradisíacas siendo las más famosas Paradise, por su fiesta continua en la propia arena, los bares y bungalós de alrededor, y Super Paradise, de arena blanca y fina, con fiesta durante el día y la noche, recomendado especialmente para el público gay.
En su capital, Chora, podremos ver una arquitectura autóctona, con casas blancas, puertas de colores brillantes y calles angostas para protegerse del viento presente en todo el país. Allí, podremos pasear por la Pequeña Venecia, un barrio con casas construidas sobre el mar, los molinos de viento (obviamente blancos) y el Museo Arqueológico, que contiene jarrones del periodo helénico, ánforas, estelas funerarias y la estrella del lugar: un jarrón de cerámica representando al caballo de Troya.
Grecia es un paraíso terrenal que te espera: playas, historia, mitología, ruinas y fiesta ¿Qué más hace falta? Haz ya las maletas, elige el bikini y apronta la cámara de fotos ¡Nos vamos a las islas griegas!