Nuevos proyectos en el Parque de Doñana suscitan recelos
Como ya sabemos todos, cuando el capital entra por la puerta, la defensa del medio ambiente sale por la ventana.
La agricultura intensiva así como el alza extrema del precio del diesel, gasolina y gas natural golpean la puerta de este espacio natural con intención de dejar pasar proyectos un tanto sospechosos de poder causar un empeoramiento de este espacio.
Quien mas y quien menos siente pena e impotencia por el estado de conservación de espacios otrora paradisíacos como por ejemplo la laguna salada del Mar Menor en Murcia, un espacio único en Europa con un altísimo interés ecológico.
Las Tablas de Daimiel, otro humedal de la provincia de Ciudad Real, es otro ejemplo flagrante de como la avaricia de unos pocos y la inacción de las administraciones pueden llevar a espacios de alto valor ecológico al límite de su existencia.
En este artículo haremos mención al nuevo objetivo de la degradación de nuestro patrimonio natural, el Parque de Doñana situado en las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz de Andalucía.
El Parque de Doñana
Dos ríos, el Guadalquivir y el Tinto, forman el Parque Natural de Doñana en el extremo sur de España. Se trata de una de las mayores reservas de humedales de Europa y es el hábitat de numerosas especies de aves acuáticas así como el principal bastión del carismático Lince Ibérico.
Doñana consta de más de 100.000 hectáreas de las que alrededor del 40% conforman el Parque Nacional y el restante, el Parque Natural.
La connotación de Parque Natural y Nacional es importante pues cada una de ellas conlleva un grado de protección particular.
Dos focos de alto riesgo en el Parque Natural de Doñana
-Ya a principios de este año 2022 saltó a la palestra la intención del gobierno de la región de regularizar mas de 1.000 hectáreas de regadío ilegales. Este hecho podría no ser nada que hiciera saltar las alarmas sino fuera por el detalle de que el acuífero que las alimenta ya está sobre-explotado y muy degradado.
-Por otro lado, hace unos días conocíamos la luctuosa noticia de la posible creación en Doñana de un almacén subterráneo de gas natural, como los ya existentes en Gaviota (Vizcaya), Serrablo (Huesca), Yela (Guadalajara) o el popular proyecto Castor en Vinaròs (Castellón) por ser el origen de cientos de terremotos de hasta 4.2 grados en la escala de Richter y que precipito su clausura en 2014.
No profundizaremos mas en estas amenazas a nuestro patrimonio (el de todos) por parte de los poderosos lobbies. Este artículo sólo es una sencilla y escueta llamada de atención.