Desde su aparición en los años 80, el balón gástrico representa una ayuda invaluable para las personas con problemas de obesidad o cualquier trastorno adicional que complique la posibilidad de tener un peso ideal.
La implantación indolora y mínimamente invasiva de esta importante alternativa en la pérdida y mantenimiento del peso, elimina la necesidad de recurrir a la cirugía. Su colocación, está sujeta a una examinación previa del estómago que confirme la inexistencia de condiciones que lo contraindiquen, minimizando los riesgos.
Contenido del artículo:
¿Cómo funciona el balón gástrico ajustable?
El balón gástrico ajustable, es un dispositivo de silicona en forma de globo insertado en el estómago a través de endoscopia. Una vez instalado, ocupa espacio en la cavidad cumpliendo el propósito de generar sensación de saciedad, disminuyendo el consumo de alimentos.
Favoreciendo la pérdida de peso, el método presume de una alta tasa de efectividad. Sin embargo, la eficiencia del tratamiento está condicionada a la elección del dispositivo correcto y del adecuado equipo médico que acompañe al paciente durante el proceso. ´
Las opciones de Spatz tienen a favor una efectividad sostenida, reavivando el efecto del balón para garantizar los resultados, a lo largo de los 12 meses que suele durar el dispositivo dentro del estómago.
El proceso es bastante sencillo, sólo dura alrededor de 20 min y es ejecutado bajo sedación para evitar molestias. El balón, es introducido desinflado en el estómago por un endoscopista a través de la boca, siendo finalmente rellenado con suero salino tras su colocación y fijación.
Mayor tiempo para habituarse a un estilo de vida saludable
Difiriendo del balón gástrico tradicional, el nivel de resistencia y durabilidad de los dispositivos ajustables posibilita su permanencia en el estómago durante 12 meses, tiempo suficiente para lograr que el paciente se adecúe a una alimentación más saludable ya que dispondrá de un lapso mayor de reducción de ingesta calórica.
El problema del falso estímulo que impide la pérdida significativa de peso queda eliminado, mismo que se presenta con el balón tradicional obligando a su retiro a los 6 meses. Siendo ajustables, la innovadora opción permite el reajuste del volumen en el estómago, haciendo que lo vuelva a reconocer y que se puedan conseguir mejores resultados en la pérdida de peso.
En al menos el 80% de los pacientes, la pérdida de peso oscila entre los 20 y 35 kg, siendo la mejor parte, el mantenimiento del peso alcanzado, eliminando la preocupación del temido “efecto rebote”.
Actúa de acuerdo a las necesidades del paciente
El volumen ocupado en el estómago por el balón ajustable disminuye de forma drástica la sensación de apetito, enalteciendo el vaciado gástrico. De acuerdo a ello, es mitigado el deseo de comer estabilizando los niveles de glucosa al eliminar el círculo vicioso del hambre-ansiedad-hambre.
Siendo ajustable, el dispositivo permite la modificación de su tamaño conforme a la fase del tratamiento y los requerimientos del paciente, otorgando sensación de control desde el primer momento e incrementando las probabilidades de lograr una mayor pérdida y disminuyendo las de rechazo.
A través de una sencilla endoscopia, el médico a cargo supervisa las características particulares de cada paciente determinando el incremento del volumen del balón a mitad del tratamiento.
Resultados inigualables en 12 meses de tratamiento
El diseño del dispositivo brinda la tranquilidad de poder llevarlo hasta 12 meses sin riesgo, tiempo suficiente para lograr la pérdida de peso y afianzar los nuevos hábitos adquiridos.
Tras la evaluación de las necesidades y evolución personal del paciente, el equipo médico determinará la duración exacta del tratamiento. El balón gástrico ajustable contribuye a alcanzar el peso ideal de forma eficaz y rápida, resultado que demanda acompañar el tratamiento de un programa que renueve el estilo de vida a uno más saludable.