La agorafobia.

¿Cuáles son los signos y síntomas de la agorafobia? Puede sonar redundante afirmar que la agorafobia es una fobia, pero comprender la agorafobia como un tipo específico de fobia hace que sea mucho más fácil comprender los síntomas.

La agorafobia a menudo se interpreta erróneamente como un miedo a salir de casa, sin embargo, esto no es del todo exacto. La agorafobia es la fobia de estar en una situación donde escapar sería difícil o imposible, o la ayuda no estaría disponible si ocurriera un ataque de pánico .

 

¿Qué es una fobia?

Una fobia es un miedo abrumador e irrazonable a un objeto o situación que presenta poco peligro real pero que provoca ansiedad y evasión. A diferencia de la breve ansiedad que siente la mayoría de las personas cuando dan un discurso o hacen un examen, una fobia es duradera, causa reacciones físicas y psicológicas intensas y puede afectar su capacidad para funcionar normalmente en el trabajo o en entornos sociales.

No todas las fobias necesitan tratamiento. Pero si una fobia afecta su vida diaria, hay varias terapias disponibles que pueden ayudarlo a superar sus miedos, a menudo permanentemente.

Tipos de fobias:

Las fobias se dividen en tres categorías principales:

  • Fobias específicas.  Una fobia específica implica un miedo irracional y persistente de un objeto o situación específica que no guarda proporción con el riesgo real. Esto incluye un miedo a situaciones (como aviones o espacios cerrados); naturaleza (como tormentas eléctricas o alturas); animales o insectos (como perros o arañas); sangre, inyección o lesión (como cuchillos o procedimientos médicos); u otras fobias (como ruidos fuertes o payasos). Hay muchos otros tipos de fobias específicas. No es inusual experimentar fobias sobre más de un objeto o situación.
  • Fobia social.  Más que solo timidez, la fobia social implica una combinación de excesiva autoconciencia y un temor al escrutinio público o la humillación en situaciones sociales comunes. En situaciones sociales, la persona teme ser rechazada o evaluada negativamente o teme ofender a los demás.
  • Miedo a los espacios abiertos (agorafobia). La agorafobia es un temor a una situación real o anticipada, como usar el transporte público, estar en espacios abiertos o cerrados, hacer cola o estar en una multitud, o estar solo fuera de la casa. La ansiedad es causada por el temor de que no haya un medio fácil de escapar o ayuda si se desarrolla una ansiedad intensa. La mayoría de las personas que tienen agorafobia lo desarrollan después de tener uno o más ataques de pánico, lo que les hace temer otro ataque y evitar el lugar donde ocurrió. Para algunas personas, la agorafobia puede ser tan grave que no pueden salir de su hogar.

 

La agorafobia es esencialmente un miedo a los ataques de pánico.

La agorafobia a menudo es una fobia progresiva y puede llevar incluso a ser incapaz de abandonar el hogar. Sin embargo, es el ataque de pánico, más que el acto de estar en público, la causa del miedo.

Signos y síntomas específicos de agorafobia.

Los signos y síntomas de la agorafobia pueden incluir:

  • Sentimientos de pánico: La agorafobia puede convertirse en un ciclo autorreplicante. El paciente está ansioso por tener un ataque de pánico que, a su vez, puede conducir a un ataque de pánico. Con el tiempo, las situaciones específicas que pueden llevar a un ataque de pánico se generalizan, lo que lleva a un mayor sentimiento de ansiedad, y así sucesivamente.
  • Comportamiento evitativo: Limitar las actividades de la vida diaria en un esfuerzo por evitar situaciones en las que la ayuda para un ataque de pánico no esté disponible, se conoce como conductas evitativas. Lo que inicialmente puede ser un miedo a un ataque de pánico en una situación específica puede generalizarse lentamente, aislando secuencialmente a una persona.
  • Agrupamiento: Un grupo de situaciones evitadas generalmente está presente. Los grupos comunes incluyen el transporte público; compras; conducción; salir de casa de casa. Al principio de la afección, los síntomas pueden agruparse en torno a uno solo de estos «miedos a espacios abiertos» comunes; con el tiempo, la ansiedad en otros a menudo también se desarrolla. Por ejemplo, al principio, una persona solo puede sentir un miedo asociado con el transporte público. Las limitaciones que plantea este miedo pueden limitar la capacidad de las personas para ir de compras, a trabajar y más. Con el tiempo, esto puede llevar al miedo a dejar el hogar por completo.

Los síntomas de esta fobia se manifiestan no sólo por exposición, es decir, cuando se está in situ, en el lugar que produce el miedo sino que también puede darse  previamente sólo por el hecho de pensar que debe exponerse. Entre ellos podemos destacar:

  • Exceso de sudoración.
  • Respiración dificultosa.
  • Una frecuencia cardíaca rápida.
  • Temblando o temblando.
  • Entumecimiento u hormigueo de sus manos y pies.
  • Indigestión.
  • Una sensación de pérdida de control.

 

Desarrollo de agorafobia.

La agorafobia a menudo se desarrolla a partir de un trastorno de pánico no tratado , y se estima que entre un tercio y la mitad de las personas con trastorno de pánico terminan desarrollando agorafobia.

Sin embargo, a veces se desarrolla agorafobia sin antecedentes de trastorno de pánico.

En este caso, el miedo a quedar atrapado en una situación particular no da como resultado un ataque de pánico en toda regla. En cambio, los síntomas pueden ser de naturaleza más física, como dolores de cabeza o diarrea.

Un profesional de la salud mental puede determinar si sus síntomas son los de agorafobia u otro trastorno.

 

Opciones de tratamiento para la agorafobia.

La ayuda profesional casi siempre se recomienda para controlar los síntomas de la agorafobia. La psicoterapia, específicamente las terapias como la desensibilización sistémica pueden ser muy efectivas para reducir los síntomas. Los especialista ayudarán a desarrollar técnicas para controlar los síntomas de su agorafobia, desde el uso de técnicas de relajación hasta encontrar apoyo social.

 

Conclusión sobre los síntomas de la agorafobia

Puede ser más fácil entender los síntomas de la agorafobia si reconoce que el temor principal es tener un ataque de pánico, en lugar de una situación específica. Por lo tanto, cualquier cosa que pueda precipitar un ataque de pánico, como encontrarse en un lugar en el que escapar puede ser difícil, podría provocar síntomas.

Este miedo a tener un ataque de pánico limita a una persona al dificultarle ir a trabajar, ir a la tienda, viajar o incluso salir de la casa.

Sin tratamiento, la agorafobia puede llevar a una tremenda sensación de aislamiento y soledad, pero existen tratamientos efectivos disponibles.

 

Fuentes de este artículo:

  • http://www.elpradopsicologos.es/ansiedad/agorafobia/
  • Imai, H., Tajika, A., Chen, P., Pompoli, A., T. Furukawa. Terapias psicológicas versus intervenciones farmacológicas para el trastorno de pánico con o sin agorafobia en adultos.
  • Asociación Americana de Psiquiatría. Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales (5ª Ed.). Washington DC. 2013.
  • Inoue, K., Kaiya, Hara, N. e Y. Okazaki. Una discusión de varios aspectos del trastorno de pánico dependiendo de la presencia o ausencia de agorafobia . Comprehensive Psychiatry . 2016. 69: 132-5.

 

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